Una ciudad que me desea.
Me busca.
Me mira.
Me llama.
Me trae.
Me atrapa.
Me lleva a la boca.
Me muerde.
Me mastica.
Me chupa.
Me saborea.
Me traga.
Me aprieta.
Me estruja.
Me exprime.
Me despedaza.
Me mantiene adentro.
Me transforma.
Me cambia.
Me intoxica.
Me envenena.
Me saca todo lo bueno.
Me compacta.
Me lleva a la puerta de salida.
Y cuando ya no me necesita, me expulsa.
Con mucho olor a podrido.
Con algo de dolor y algo de placer.
Y me devuelve.
Hecha una mierda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario